El título del artículo periodístico reflejaba, entre comillas, una de las explicaciones del profesional del derecho: “Tiene atractivo sobre las mujeres, eso no es delito”. Semejante planteo defensivo molestó al Instituto de Mujeres, Géneros y Disidencias del Colegio de la Abogacía de Entre Ríos, que, a través de Facebook, salió a repudiar las expresiones de Arcusín.
El Instituto de Mujeres publicó un texto en el que señala: “Repudiamos tajantemente las declaraciones mediáticas realizadas por parte de la defensa técnica del Sr. Fabián Constantino, quien fuera intendente de Gilbert, Entre Ríos. Ningún profesional del derecho puede hacer apología del delito sexual, anticipando conclusiones psico-sociales sobre niñas, niños y adolescentes ni de ningún/a denunciante, como así tampoco comparar patrones de varones y justificar conductas abusivas con ‘características’ que llevarían a cometer posibles delitos contra la integridad de las mujeres sólo por tener un ‘atractivo sobre las mujeres’. Criterios penales y de todas las áreas carentes de perspectiva de género ya no son admitidos ni aceptados. Exigimos aplicación de la ley Micaela para todos y todas las profesionales del Derecho”.
La entrevista a Arcusín
“Esta es la primera vez que salimos por un medio. He pedido derecho a réplica en otros espacios y no me han respondido. Esta es nuestra primera oportunidad de hablar”, comienza a decir Arcusín, quien comparte dos características con Otarán; ambos son abogados afiliados al partido Radical, aunque asegura que “nunca mezclé la política con nada”.
En este contexto, ambos se hacen cargo de la defensa del presidente municipal de Gilbert, quien forma parte del Partido Justicialista.
“Tenemos que escuchar todas las voces y que la Justicia actúe”, sostiene Arcusín, como fiel defensor de los procesos judiciales, y adelanta que pedirá el sobreseimiento. “La segunda salida es aceptar que se pudo haber cometido algún delito y evitar un juicio oral, entonces podríamos ir a un juicio abreviado por el mínimo de la pena. Y la tercera opción es ir a un juicio oral ante un Tribunal, si la pena máxima es menor a 20 años. El juicio oral sería si la pena pedida excede los 20 años”, explica el letrado.
La causa Constantino se encuentra actualmente en la investigación Penal Preparatoria (IPP), es decir que hasta ahora la causa no se ha elevado a juicio.
Arcusín se presenta como un abogado técnico con mucha experiencia en delitos sexuales y por este motivo fue que Constantino lo habría contratado; “sumado a mi capacidad de hablar y estar en los medios porque también tengo carnet de periodista. En la defensa técnica vamos a estar junto a Fabián Otarán”, suma.
-¿Cuáles son las pruebas con las que cuenta la Justicia contra Constantino?
Mario Arcusín (M.A.)- Las pericias psicológicas tienen muchas fallas; porque la pericia puede demostrar la realidad que la persona ha sufrido algún tipo de daño de este tipo, pero no puede probar quién es el autor, ese es el problema. Sino, uno puede estar traspolando una situación que le ocurrió con otra persona y la traspola a otra persona que tiene mayor licencia pública como en el caso de Constantino.
Las tres pericias tienen semejanzas muy raras. Es muy extraño que en tres pericias a mujeres distintas (por más que sean del mismo pueblo) porque son de distinta edad y extracción social… todo esto hace suponer que no van a ser idénticas, pero son casi idénticas, como si se hubiera tomado un modelo.
Estos delitos se llaman de oscuridad o de silencio porque es muy difícil que haya testigos, excepto que alguien deje un teléfono grabando. Esto hace que las pruebas se reduzcan muchísimo. No puede estar Juancito debajo de la cama viendo qué es lo que pasó. Entonces, la prueba principal que maneja Fiscalía son las pericias psicológicas y la declaración de las supuestas víctimas
– ¿Cuál es la hipótesis que manejan desde la defensa?
M.A.: – Yo estoy convencido que a Constantino le hicieron una cama, y esto no quiere decir que no haya habido una relación. En una de sus declaraciones como imputado él reconoce haber tenido relaciones con una de las tres denunciantes, pero son personas mayores.
Según el Derecho Penal argentino, todas las relaciones con menores de 15 años son abusos con acceso carnal; desde los 15 a los 18 se llama estupro y ahí no se puede alegar ningún tipo de consentimiento, porque se supone que una menor de 18 años no tiene conciencia, aunque ahora ya sabemos que una de 12 tiene más conciencia que yo que tengo 66 (sic). Entonces, se suponía que una menor de 18 años no entendía lo que estaba haciendo; o le parecía un juego. Entonces, si un mayor se aprovechaba de eso, cometía un delito.
-Entonces, ¿qué pasó después si la relación fue consentida? ¿Por qué lo denunciarían?
M.A: – Suele suceder que del amor al odio hay un paso muy cercano. Si llegamos a probar con Otarán que hay relaciones que no existieron y que otra fue consensuada, o que la otra no pasó de ser un simple cariño, no tenemos que probar nada más que eso, porque las relaciones amorosas no tienen por qué probarse.
Yo estoy divorciado y tengo libertad de estar con quién quiera, siempre que sea mayor y ambos estemos de acuerdo. Antes existía el adulterio dentro del matrimonio, hoy ya no existe.
Antes estas leyes eran peor para las mujeres, pero ahora, en vez de emparejarnos, nos hemos ido para el otro lado. Lo digo porque soy el abogado de Entre Ríos que más experiencia tiene en delitos sexuales. Y es evidente que ahora se invierte, porque el principio de inocencia y el derecho de defensa se revierten; y en vez de tener que probar la mujer si es cierto lo que dice; el hombre tiene que probar que no es cierto lo que dice.
– ¿Cuáles son los pasos judiciales que se vienen?
M.A: – Si llegamos a juicio oral se va a juzgar si hubo abuso sexual; no se va a juzgar si se rompió una perimetral. Entonces, se va a evaluar si le tocó la cola o le tocó los pechos, eso deberá probarse.
Si se piden más de 20 años de pena debería hacerse a través de un juicio por jurado; y ahí tenemos que convencer a 11 personas con un idioma muy distinto al que se usa en una pericia psicológica, que está hecha para que la entendamos quienes tenemos estudios universitarios o terciarios y que entendemos el lenguaje y el idioma.
Yo no sé cómo van a tomar las personas comunes las declaraciones de estas personas. Yo voy a probar que las relaciones fueron consentidas, y tengo pruebas…
– ¿Por qué no habían hablado nunca con los medios de prensa? ¿Por qué el silencio durante tantos meses?
M.A: – En la Justicia se tiene que probar la culpabilidad, no son los medios de prensa los que tienen que decir que Constantino es un delincuente; por eso me opongo a la palabra ‘víctima’ y a que sólo se escuche la palabra de las tres mujeres.
–Si con todas fueron relaciones consentidas o inexistentes ¿Por qué lo denuncian todas a él?
M.A: – En Villa Mantero tengo 5 casos. En un pueblo chico es muy común que esto suceda. Una cosa es que sea mujeriego y que tenga atractivo sobre las mujeres por su formación, -porque en un pueblo chico, salvo un médico y algún odontólogo- todos tienen el secundario. Los chicos emigran cuando terminan la escuela y no hay profesionales.
Constantino tiene un título de Psicología Social, fue durante muchos años Director de Cultura. Es una persona que siempre tuvo auto; convengamos que hay cierto tipo de hombres que tiene un atractivo sobre las mujeres; así como hay ciertas mujeres que tienen atractivo sobre los hombres. Pero eso no está en el Código Penal.
– Usted dice que Constantino tiene un perfil poderoso ¿y que eso lo convierte en atractivo para las mujeres?
M.A: – Pero no me refiero al poder que le otorga su cargo de presidente municipal, sino al poder que le otorgan sus características y estoy hablando casi en primera persona: Por ejemplo, yo estoy divorciado y soy consciente que mi presencia física… soy una persona de 1.90 metros, tengo un auto nuevo, tengo una casa grande, soy muy conocido; es decir, tengo un atractivo que no lo puedo negar. Reconozco que habemos ciertas personas que tenemos algunas que tenemos algunas características que nos hacen más atractivos. Pero esto no está penado en el Código Penal.
– ¿Cuál es la versión de Constantino respecto a la denuncia de su ex empleada de prensa?
M.A: – Él contó que tenían una relación amistosa como tengo yo con muchísimas mujeres y con quienes no he tenido nada más que eso. Tiene whatsapp, mensajes, reconoce haberla saludado con beso y abrazo.
– Pero ¿por qué lo denuncia?
-Yo voy a presentar pruebas de cuáles pueden ser estos motivos; no puedo adelantar mucho. Yo respeto la versión que dan las mujeres y no tengo por qué no creerles, pero así mismo, ustedes tienen que respetar la versión de Constantino y no tienen por qué no creerle. Hay que dar la versión de las dos campanas sin ningún tipo de condicionamiento. Estamos en una República con división de poderes y es la Justicia la que tiene que determinar; no la prensa.
– ¿Cuál es la explicación del acusado para haber incumplido las medidas de restricción perimetral?
-Hay que tener en cuenta que en estos pueblos es muy difícil implementar medidas de restricción de estas características cuando estás a pocos metros para ir a la iglesia o a llevar a tu hijo a algún lado. Yo puedo pasar por al lado de tu lado, pero sin molestarte, pero los Jueces de Garantías no tienen en cuenta la realidad de un pueblo de 3 mil habitantes como tiene Gilbert.
La hipótesis de la interna política y de los celos masculinos
“Que él sea presidente municipal, ya de por sí, le da un tinte político. Pero, en la previa fue notorio que hubo internas y que hubo ciertas decisiones para una inversión de fórmula. En algún momento anterior a las PASO se proponía una inversión; es decir, que Meneses fuese Intendente y Constantino sea Vice. Obviamente, que una persona inteligente y conocedora de la política argentina puede pensar que puede haber motivaciones políticas y que quieran bajar a Constantino. Como no lo pueden bajar políticamente porque tiene un buen sustento, pretenden bajarlo así. Es una hipótesis. No estoy asegurando nada…pero también se puede pensar que hay celos. Hay un montón de causales que pueden haber llevado a que se arme una escena inexistente”, relató Arcusín a Ahora ElDía.
Además, sumó que otra hipótesis puede ser la de los celos. “Estamos hablando de tres mujeres. Puede haber celos masculinos porque estas mujeres tenían parejas”.
Y agregó: “El pedido de licencia suma a la hipótesis del factor político: ¿Por qué a Urribarri no le pidieron nunca que se tome licencia como Embajador de Israel? ¿Por qué a Alperovich –que fue denunciado hace tres años por su sobrina por violación- recién en diciembre pasado quedó sin fueros porque terminó su cargo como Senador? Nunca le sacaron los fueros; entonces, que alguien me explique por qué a Urribarri nadie le hizo una nota desde el PJ, o Guillermina Guastavino no hizo ninguna nota al Partido Justicialista como la que hizo para Constantino, o contra Alperovich, si estamos hablando sólo de delitos sexuales”.
En cuanto a la licencia que había recomendado el Concejo Deliberante de Gilbert, el letrado aseguró que “nuestro consejo fue que no deje el cargo. Que siga ejerciendo el puesto para el cual fue elegido por el pueblo porque todavía para él rige el principio de inocencia”. (*Las declaraciones fueron horas previas a la toma de licencia)