«La abuela que llevaba los corsos en su sangre», la define muy bien el medio «La Redota» de nuestra ciudad. Esther era muy querida en el ambiente murguero, a la que siempre estuvo unida, con participaciones de larga data en los corsos de Villaguay.
Ayer viernes tocó despedir a uno de nuestros personajes emblemáticos. Que en paz descanses, Esther ¡Y que nunca pare el carnaval!.