El 16 de diciembre una tormenta golpeó la Capital y gran parte de la Provincia de Buenos Aires y, como consecuencia, 14 personas murieron, 13 en Bahía Blanca y una en Moreno.
En los últimos días, los turistas que visitaron la Costa Atlántica también sufrieron las inclemencias del clima. En Mar del Plata, se registraron destrozos y en Miramar, además, fallecieron dos personas.
Destrozos en Miramar producto del temporal de lluvia, viento y granizo Foto: Diario La Capital de Mar del Plata.
La explicación
Lo que está ocurriendo tiene una explicación: el fenómeno de El Niño que, según confirma José Luis Stella, climatólogo del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), “está en su momento de mayor intensidad”.
A su vez, asegura que es algo que no sucedió en los últimos años, porque veníamos de varios períodos de La Niña. En tanto, remarca que las consecuencias de El Niño se extenderán hasta el otoño. En otras palabras, tendremos un verano con tormentas.
Intensificadas por El Niño
“Veníamos pronosticando esto desde hace varios meses. En verano es normal que llueva mucho, pero cuando está presente el fenómeno de El Niño hay más precipitaciones y suelen ser más fuertes”, sostiene a Clarín Stella.
Esa intensidad implica, como se viene observando en las últimas tormentas, ráfagas fuertes, que en el caso de Miramar superaron los 100 kilómetros por hora; actividad eléctrica y, en algunos de estos episodios, granizo.
Anegamientos por las lluvias en Villaguay.
Continuarán los temporales
“Nos sorprende porque hace algunos años que está el fenómeno de La Niña por lo que esto no pasaba. La Niña implica un enfriamiento de las aguas del Océano Pacífico Central. Ahora ocurre lo contrario: se empezó a calentar el océano y ese cambio se traduce en una modificación del comportamiento de la atmósfera que en el Este de Argentina lleva a que tengamos más lluvias y humedad en primavera y verano”, explica el climatólogo.
Como nos encontramos en el pico de El Niño, se espera que las tormentas sigan tanto en el Litoral como en la Provincia de Buenos Aires, con la Costa Atlántica incluida.
Temporal en Río Cuarto, Córdoba.
Un verano diferente
Para José Javier Merlos, profesor de Geografía especializado en Meteorología, “estamos ante un verano donde la inestabilidad se hará presente en forma periódica”.
Esta temporada “es distinta a las últimos dos que tuvimos, se presentará enero con más frecuencia de lluvias y tormentas como resultado de una mayor evaporación del Océano Pacífico producto de la corriente de El Niño”.
“Ayer, eran propicias las condiciones para la formación de este tipo de nubes, que son calor y humedad, y luego tienen que estar activadas por un frente frío cercano para obligar al aire cálido y húmedo a ascender. Con ese ascenso de aire más liviano se forma ese desarrollo de aire vertical. Son líneas de inestabilidad que dan paso a una sucesión de grupos de tormenta llamados cumulonimbus”, detalla Merlos.
Y agrega: “En su interior tienen aire que desciende bruscamente de las capas alta de la atmósfera hacia la superficie, eso produce ráfagas de viento de fuerte intensidad y que muchas veces se confunden con un tornado. No es tornado, lo que ocurrió en Miramar no fue un tornado, lo mismo que pasó en Bahía Blanca en diciembre, ambos episodios fueron producto de la descendente de un cumulonimbus”.