Murió en su rancho camino a Ñandubaysal, en el departamento Gualeguaychú. Tenía 84 años y una larga trayectoria.
Allí se lo sabía encontrar, debajo de un espinillo: “abrazando a una guitarra, guasqueando o escribiendo coplas”, como el mismo Augusto expresó más de una vez, publicó AHORA El Día.
Fuente: Ahora